30 · 09 · 2019
Cuando nos invitan a una boda, en principio, debemos pensar en el estilo de la ceremonia, el horario, la ubicación y la estación del año para elegir nuestro total look. Hay bodas que exigen seguir un riguroso protocolo, mientras que otras son más relajadas en ese aspecto, y no es lo mismo ir invitada a una boda en la playa que se celebre en verano, que a una ceremonia en templo y en pleno invierno.
Si bien es cierto, que respetando el colorido y longitud del traje o vestido, una invitada de boda tiene bastante margen de maniobra (no sucede lo mismo con las damas de honor), los accesorios de la invitada a una boda pueden hacer que el outfit elegido para el evento sea un acierto o un desatino. Algo parecido se puede decir de los complementos de boda. ¿No sabes cuál es la diferencia entre ambos? Sigue leyendo.
Un accesorio es un pequeño detalle que pone nuestro sello personal, pero es prescindible. Por ejemplo, una gargantilla o una pulsera.
Un complemento es una prenda imprescindible, como un bolso, un cinturón o un tocado. Entre los complementos se incluye el calzado y los relojes.
En el caso de las invitadas a una boda, un accesorio habitual sería un torques o una gargantilla. Suelen elegirse materiales metálicos, bien joyas, bien bisutería de calidad. Aunque, en una boda ibicenca, un collar de cuentas de madera podría ser no un accesorio, sino un complemento para una invitada que se decante por el típico vestido temático.
El mundo de los complementos de boda es inmenso, tanto si hablamos de complementos para la novia como si nos referimos a los de las invitadas.
Para empezar, el calzado para novias e invitadas es una categoría aparte en sí misma, donde se puede apostar por lo clásico, por las últimas tendencias o por calzado especial para ceremonias particulares. Hay zapatos verdes, zapatos con pedrería en el tacón o cubriendo todo el material visible y también botines o zuecos de boda.
Los relojes deben ser de analógicos, no digitales, y es mejor dejar en casa ese día los relojes de inspiración deportiva. Ante la duda, diseños clásicos o vintage no te dejarán en mal lugar.
Pero, si hay un tema que nos trae de cabeza, nunca mejor dicho, es el de los tocados de invitada y las pamelas para boda. Dos complementos arriesgados, ineludibles para la invitadas en muchas celebraciones, y sujetas a constantes cambios en las tendencias del momento.
Los tocados con motivos florales y las tiaras de flores son perfectas para las bodas bucólicas que se celebran en primavera o verano en un entorno verde. Bodas de inspiración celta o, por qué no, medieval.
En cuanto a las pamelas para bodas, pareciera que el protocolo referente a ellas no cambie con los años, al fin y al cabo se trata de un mismo diseño de sombrero. Craso error pensar que no hay tendencias en pamelas de boda, más allá del colorido: ¿sabías que este año se han visto pamelas de paja en ceremonias elitistas?
Por último, te recordamos el consejo de los expertos en moda que sugiere no superar en tres el número total de complementos y accesorios sumados, sin tener en cuenta el calzado o una prenda necesaria por la climatología, como un chal o un paraguas. Pero, piensa en que vas a lucir un bolso de mano, con lo que ya tienes menos margen de maniobra.
Por suerte, el protocolo de las invitadas a una boda suele ser menos caprichoso que los dictados de la moda. Ante la duda, consulta con los novios con antelación qué tipo de ceremonia están organizando.
¡Y que vivan los novios!
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